Jean Bodin
Bodino ocupó diversos cargos en la administración. Tras la matanza de San Bartolomé y la guerra, quedó claramente alineado en el bando de los “políticos” y para defender que la monarquía absoluta era el único medio de unidad y de paz escribió Los Seis Libros de la República (1576), una obra capital en la historia del pensamiento político.
Considera que el derecho de resistencia es el mayor peligro para la instauración de una monarquía sólida en Francia, por lo que la tesis central del libro es que nunca se puede justificar la resistencia contra un soberano legítimo.
Bodino se distancia de las principales líneas de reflexión política:
1. De la falta de valores morales y religiosos de Maquiavelo.
2. Del derecho de resistencia defendido tanto por los católicos como por los hugonotes franceses.
3. Y también de la construcción de Estados utópicos, como el de Thomas More
Pese a todo, Bodino consigue su principal objetivo: separar el poder monárquico del ámbito teológico y colocarlo en el jurídico
La soberanía
La existencia de la República depende de la instauración de un poder soberano que gobierne rectamente a las familias que le prestan obediencia. Bodino no atribuye la soberanía al pueblo, sino al Estado.
La soberanía es el poder perpetuo y absoluto de la República:
La soberanía es un poder perpetuo, que pervive en el tiempo independientemente de su titular. El gobernante tiene el poder soberano de forma vitalicia.
2. El titular de la soberanía tiene total disponibilidad del poder. Su poder es absoluto, es decir, no está sujeto a la ley positiva. De hecho, la ley es la expresión de la voluntad del gobernante. El soberano es el legislador que crea el Derecho positivo.